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15 abr 2007

Se escapó por poco
Ledesma vence a Carrizo

La Bombonera reventaba desde temprano. La expectativa era enorme para el primer Superclásico oficial del año. Y cuando la pelota empezó a correr cumplió con lo que se esperaba.

Sólo 45 segundos corrían en el reloj y Boca ya se ponía 1 a 0 arriba. Román Riquelme metió un pase profundo para la llegada de Pablo Ledesma, que picó entre los centrales de River y tocó corto sobre la salida de Juan Pablo Carrizo. Boca salió a matar y lo demostró en la primera llegada.

Acusando el golpe, River fue al frente poniéndole muchísimo ritmo al partido. El equipo de Daniel Passarella intentó tomar la iniciativa y adelantarse en el campo.

Pero Boca era más profundo. En dos oportunidades dejó el segundo grito de gol en la punta de la lengua de todos los hinchas.

Primero Martín Palermo recibió sólo dentro del área chica, pero definió apurado por un defensor, y con la pierna derecha. Carrizo contuvo muy seguro una chance clarísima. Minutos más tarde otra intervención genial del arquero de River salvó al Millonario de una caída segura. Riquelme sacó un remate tremendo de media distancia que Carrizo tapó espectacularmente. En el rebote Palacio intentó tocar al gol, pero el uno volvió a lucirse.

El juego de River se desdibujó. Llegaba hasta tres cuartos de cancha y no podía avanzar, más sobre todo por la solidez de Boca a la hora de cortar los avances.

Gran primer tiempo de Ever Banega, Riquelme y sobre todo de Ledesma que marcó con justeza y administró la pelota con mucha precisión.

Antes del final del primer tiempo Palacio tuvo dos buenas chances para poner el 2-0. Primero Carrizo le tapó un mano a mano y en la segunda jugada remató demasiado alto sobre el travesaño. El arquero de River era responsable de que la diferencia no fuera mayor.

En la segunda mitad River sorprendió con el empate a los 5 minutos. Marco Ruben habilitó a Mauro Rosales, que picó marcado por Morel Rodríguez. El delantero definió y con mucha fortuna el remate pegó en Morel y descolocó a Caranta.

La igualdad cambió el curso del partido. Se jugaba con mucha dinámica, de ida y vuelta. Estaba para cualquiera.

Boca tuvo varias chances para llegar al segundo gol. Riquelme tuvo un lindo tiro libre que se fue por encima del travesaño.

También Palermo tuvo en su cabeza dos buenas posibilidades, pero el goleador no estuvo derecho. Uno de los remates se fue muy ancho y otro por sobre el horizontal.

Pero River también estuvo cerca. Fernando Belluschi desperdició una muy clara dentro del área. Su remate de media vuelta se fue muy cerca del palo derecho de Caranta.

Aunque sin dudas, la jugada del partido fue un tiro libre de Román cuando el partido se moría. El disparo del volante se desvió en la cabeza de un jugador de River y descolocó a Carrizo, que mostrando sus excelentes reflejos despejó con la punta de su pie derecho cuando la pelota se metía.

Un Superclásico a pura emoción que se escapó por muy poco.

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